Aunque tú no estés ya..

Ando perdido aún sabes? Ando perdido en tus recuerdos y en la comisura de tus labios que ha dejado cicatriz en este extraño corazón, que por alguna razón fuiste tú a quién eligió y no a cualquier otro. Nunca sabré si fuiste mi mayor error, o mi mayor victoria, pero lo que si sé amor es que la vida hoy tal y como la conozco sería muy diferente. Y lo cierto es que aunque fuiste mi farola en la oscuridad, mi rayo protector, que guiaba mi corazón en este sendero de odio y luz, he de aprender a encontrar mi propio brillo. En esta oscuridad solo hay dos opciones, y es la siguiente: aprender a hacer fuego por ti mismo y dar luz a tus sombras, o aprender a bailar de en la oscuridad. Aceptar que París nunca estuvo hecho para nosotros, ni nosotros para París. Por eso nunca nos quedará París cielo. Hay que dejar de culpar a la vida de nuestros errores, y es que nuestro mayor reto será dejar marchar lo que un día amamos. Y puede ser que esto último sea lo más complicado, como aquel pájaro que alza el vuelo por primera vez y teme caer al suelo. Y este gesto solo le hace más valiente. A lo largo de los años aprendes tantas cosas, y parece que la vida no para de enseñarnos nuevas cosas. Porque cuando crees entender cómo funciona el mundo, el mundo decide darte nuevos problemas sin resolver. Y tú hada madrina es incapaz de solucionarlos, porque para ella también es todo nuevo. Y es que la felicidad no se compra en frascos de cristal, sino se consigue con la aceptación de nuestros errores. Y nunca será cuestión de ver el vaso medio lleno o medio vacío, será cuestión de saber nadar en nuestro océano de lagrimas y no dejarte hundir. Y ahí es cuando te das cuenta de que la luz siempre estuvo encendida, pero fuimos tan estupidos de tener el corazón vendado y no verlo. 🎆 



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